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ERITROMELAGIA

CONCEPTO

Eritromelalgia es una patología infrecuentecaracterizada por la tríada de: eritema, calor y dolor en extremidades.

INCIDENCIA Y PREVALENCIA

La incidencia y prevalencia de esta patología son complicadas de establecer debido a la falta de estudios y la rareza de la enfermedad. Se sospecha que es más frecuente de lo que aparece en los estudios, sobre todo la de escasa gravedad, que no es considerado por los pacientes como motivo de consulta. Se realizó un estudio en la población noruega que aportaba los siguientes resultados: incidencia: 2,5-3,3 casos por millón de habitantes y año y prevalencia anual de 18-20 casos por millón de habitantes (Mork, 1997).

ETIOLOGÍA Y CLASIFICACIÓN

La etiología de eritromelalgia es desconocida.

Clasificaremos tres grandes grupos:

Eritromelalgia. Se incluirían todos aquellos casos asociados a trombocitemia en síndromes mieloproliferativos, sobre todo trombocitosis esencial y policitemia vera.

Eritermalgia primaria. Desorden congénito que recientes investigaciones lo relacionan con mutaciones en el gen Nav1.7 de los canales de sodio (Fischer, 2010).

Eritermalgia secundaria. Como efecto secundario de algunas drogas: vasoactivas, antagonistas del calcio; o asociado a otras patologías subyacentes: gota, LES, artritis reumatoide, crioglobulinemia, endarteritis obliterante, tromboangeítis obliterante, poliarteritis nodosa, arteriosclerosis, diabetes mellitus, enfermedades neurológicas y vasculares.

FISIOPATOLOGÍA

La fisiopatología de este síndrome es desconocida, pero existen diversas hipótesis:

• Griesshammer et al y van Genderen et al, con sus estudios sobre la actividad plaquetar en la eritromelalgia, sugieren que está causada por la activación y agregación de plaquetas con hipersensibilidad a los factores procoagulantes, con la formación de trombos inestables en la parte distal de la microcirculación, sin la capacidad de formar un trombo adherido con fibrina pero sí de, temporalmente, ocluir el vaso produciendo los síntomas. Esta hipótesis explica la eritromelalgia (Mork, 2000; Tarach, 2000; Davis, 2003).

• Davis et al (Davis, 2003) proponen un origen neurológico sustentado en dos hipótesis:
“Effector hypothesis”: sugiere una alteración humoral en el microambiente, impidiendo el buen funcionamiento de la fibra muscular de los vasos.
“Distal neural hipótesis”: disminución de las catecolaminas en los plexos periarteriales.

• Davis et al (Davis, 2003) proponen una hipótesis vascular: el aumento de flujo vascular local, acompañado de hipoxia en la región, apoyan la idea de Mork et al de fístulas arteriovenosas a este nivel que se permeabilizan con el aumento de temperatura. Estas dos últimas hipótesis explican el término de eritermalgia.

CLÍNICA Y DIAGNÓSTICO

El diagnóstico se basa en la historia clínica y en la exploración física, sin necesidad de exploraciones complementarias. El cuadro clínico típico es la elevación de la temperatura cutánea asociado a eritema e intenso dolor, más frecuentemente de afectación simétrica y de miembros inferiores. El dolor es intermitente, con periodos de tiempo de mayor dolor denominados “ataques”, que varían desde minutos a horas; la duración y gravedad de los síntomas aumenta en verano y pueden ser inducidas por el ejercicio físico, descendiendo o presionando la extremidad afecta. Algunos pacientes refieren empeoramiento con la ingesta de alcohol. Por otro lado, refieren mejoría con el enfriamiento o con la elevación de la extremidad afecta (Mork, 2000; Drenth, 1990; Charkoudian, 2003).

Criterios diagnósticos:

• Dolor tipo quemazón en extremidad.

• Dolor que empeora con el calor.

• Dolor que mejora con el frío.

• Eritema en la piel afecta.

• Aumento de temperatura en la piel afecta

La biopsia cutánea demuestra en algunas series de pacientes trombos intravasculares y proliferación de la íntima que no se han demostrado en otras (Davis, 2000).

Las pruebas complementarias en este síndrome van encaminadas a diagnosticar procesos subyacentes como en la eritromelalgia o eritermalgia secundaria. Se aconseja recuento y fórmula de la serie roja y blanca, bioquímica sérica con determinación de glucosa sérica y anticuerpos antinucleares (Mork, 2000).

Diagnóstico diferencial

La eritromelalgia es un cuadro clínico cuyo diagnóstico, según se ha expuesto anteriormente, se realiza con la historia clínica y la exploración física. Pero en un estadio precoz de la enfermedad, pueden no estar presentes todos los síntomas y signos, y debemos realizar el diagnóstico diferencial con una serie de patologías (Mork, 2000; Davis, 2000):

• Polineuropatías.

• Distrofia simpático-refleja.

• Erisipela.

• Osteomielitis.

• Angiodiskinesia.

• Acrocianosis.

• Lipodermatosclerosis.

PRONÓSTICO Y CONCLUSIONES

El pronóstico de la enfermedad depende del tipo, de la gravedad de los síntomas y de la respuesta al tratamiento. Los pacientes pueden presentar úlceras dérmicas y múltiples lesiones cutáneas secundarias a los métodos de enfriamiento de la extremidad afecta para aliviar el dolor. En estadios avanzados podemos encontrar lesiones graves de isquemia e incluso gangrena (Davis, 2000).

TRATAMIENTO

En la eritromelalgia, el tratamiento con ácido acetilsalicílico a bajas dosis (40-100 mg) o indometacina junto al tratamiento de la trombocitosis, han demostrado ser efectivos en el control de la enfermedad. Las flebotomías en la policitemia vera no han demostrado eficacia. Si el proceso mieloproliferativo cursa con historia de episodios de sangrado, el ácido acetilsalicílico está contraindicado (Tarach, 2000).

En la eritermalgia secundaria, el tratamiento y/o control de la patología subyacente mejora el cuadro clínico (Tarach, 2000).

En la eritermalgia primaria, el tratamiento es el del dolor neuropático con analgésicos tópicos, orales, opioides, anticomiciales, antidepresivos, etc. También se ha utilizado lidocaína y ketamina endovenosa y parches de lidocaína. La respuesta de los pacientes a estos tratamientos es muy variable y su eficacia, controvertida (Davis, 2002; Kuhnert, 1999; McGraw, 1997; Rauck, 1997).

El tratamiento de las complicaciones, como las dermatitis o las úlceras vasculares, se realizaría con medicación tópica y curas locales a cargo de enfermería.